La motosierra avanza en los barrios

El estrangulamiento de la Nación a las cuentas provinciales empeora la situación financiera de varias políticas dirigidas a jóvenes, como el Ecos y Hueche, a punto de cerrar. Lo cuenta Oscar Merino, coordinador de los programas en Bariloche.

Dos programas de proyectos artísticos, deportivos y laborales para jóvenes rionegrinos podrían cerrar definitivamente. Se trata de Espacio Comunitario de Organización Social (ECOS) y Hueche, que dependen de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SeNAF) de la Provincia. La política de ahogo a las provincias viene poniendo en jaque varias iniciativas orientadas a los jóvenes y niños de los sectores populares como “Fortalecimiento Familiar”, “Familia Solidaria”, “Jóvenes en Conflicto con la Ley”, “Esquí Escolar”. Otros ya dejaron de funcionar, como Ecos y Hueche en Catriel, San Antonio y Jacobacci.

 “Hay una cantidad de situaciones de demanda, de derechos vulnerados que no están siendo abordados de manera inmediata, lo cual habla de un problema”, reconoció la titular de la SeNAF, Laura Demarco, al diario Rio Negro.

Conversamos sobre el tema con el coordinador de Ecos y Hueche en Bariloche, Oscar Merino.

– ¿Cómo funcionan los programas en la ciudad?

-Nosotros estamos en cinco espacios, donde hacemos actividades para jóvenes de entre 12 y 18 años, desde cocina fácil, artesanías, guitarra. El año pasado junto al programa provincial Usinas Culturales realizamos un taller de música. Este año participamos de la Convención Otaku y del Festival de Títeres Andariegos, arrancamos con fútbol callejero junto al Centro de Prevención de Adicciones y la Agencia de Prevención de Adicciones. Todos los talleres son a demanda de los pibes.

– ¿Cómo llegan los chicos a ustedes?

-Llegan por un hermano que ya participa, o se enteran en el barrio. Son pibes que, en muchos casos, no tienen el acompañamiento de las familias. Están yirando por la calle.

– ¿Dónde funcionan Ecos y Hueche?

-Los espacios son convenidos con instituciones, que cambian todos los años. En su momento estuvimos en Barrio Vivero, donde se hizo un laburo durante años. Por falta de acondicionamiento, nos fuimos donde funciona el Centro de Atención y Articulación Territorial 4 en Mange y Onelli. Estamos también en Nahuel Hue, en Ruka Che -que sí es un espacio del Ministerio de Desarrollo-, en el gimnasio Newenche, en la Escuela La Llave y en una escuela de la Fundación Gente Nueva en Virgen Misionera.

– ¿Cómo llegó a sus oídos que el programa podría definitivamente cerrarse?

-En marzo cerraron los espacios de Jacobacci, Catriel y San Antonio Oeste. Entonces adujeron que no había convenio de uso de los espacios con otras instituciones, y que hacía falta ese personal para cubrir lo que son las áreas de Fortalecimiento Familiar y los hogares de tránsito. La realidad es que la SeNAF dejó de contratar personal y que recién ahora está haciendo una convocatoria. En Bariloche renunciaron alrededor de 15 operadores y 5 técnicos. Eso debería haber sido cubierto rápidamente.

– ¿La información que llegó a ustedes habla efectivamente de un cierre?

-En este momento estoy de licencia por paternidad, pero mis compañeros tuvieron una reunión con las delegadas de la secretaría que comunicaron la decisión del gobernador y de la secretaria Laura De Marco. Ayer realizamos una asamblea provincial, contaban algunos compañeros y compañeras que en algunas localidades a cambio de no cerrar te pedían colaborar con otros programas. Desdoblar al trabajador, una locura.

-El argumento que ustedes intuyen, porque no se los confirmaron, es que necesitan personal para disponer de ese recurso humano en otro sector.

-Sí, exactamente, con pago de horas extras, francos compensatorios. En definitiva, explotar un poco más al trabajador.

-Desde hace tiempo que trabajadores del Ministerio, sobre todo de la SeNAF, denuncian falta de recursos y personal.

 -Sí, el año pasado al menos, en los hogares se escucharon un montón de estas denuncias, de falta de personal, mucha violencia, vidrios rotos, lugares que no estaban en condiciones. Es una situación que se viene agravando.

Redacción

Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen

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